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El artículo de hoy va dirigido a unos de los productos más consumidos hoy en día en la alimentación moderna, EL AZUCAR.
El cierta ocasión el nutriólogo Jean Mayer (científico estadounidense mejor conocido por su investigación sobre las bases fisiológicas del hambre y el metabolismo de nutrientes esenciales, y por su papel en la formulación de políticas sobre hambre en el ámbito nacional y niveles internacionales. Como profesor en la Escuela de Salud Pública de Harvard, Mayer dirigió un laboratorio que realizó un trabajo pionero sobre la regulación hipotalámica de la obesidad y diversos trastornos metabólicos). Dijo lo siguiente: prácticamente, la única cosa buena que puedo decir del azúcar es que sabe bien.
Al igual que cientos de investigadores, citaré algunos inconvenientes del azúcar, tanto azúcar común como los otros azucares refinados, incluso, cabe decir que la miel, alimento natural rico en minerales y vitaminas, ha de tomar con prudencia, ya que cualquier tipo de azúcar de rápida asimilación tomado con frecuencia puede provocar agotamiento suprarrenal por excesiva estimulación de los niveles de adrenalina. No obstante, si con la miel hay que ser prudente, con los azucares y repostería industrial hay que decir ¡PELIGRO!
Aquí les dejo algunas razones:
Son calorías vacías. Es decir, no aportan proteínas, lípidos, minerales, vitaminas o fibra.
En el metabolismo del azúcar se consumen importantes cantidades de vitaminas del grupo B y minerales especialmente calcio.
Favorece el aumento de triglicéridos y la obesidad.
Los desórdenes homeostáticos y endocrinos, como resultado del consumo diario de azúcar, pueden provocar hipoglucemia reaccional, además de todo lo que conlleva: nerviosismo, irritabilidad, depresión, agotamiento, infecciones bacterianas, etc.
Cuando el consumo es superior a 50 gr. Diarios durante largo tiempo, los problemas se multiplican. Y no pensemos que es tan difícil sobre pasar esta cantidad en nuestra sociedad edulcorada. Simplemente, sumando el azúcar añadido a 2 o 3 cafés, el azúcar de 2 o 3 productos industriales azucarados (galleras, bollería, etc.), un poco de chocolate, alguna bebida refrescante o jugo de frutas (la mayoría contienen hasta un 30-40% de azúcar), podemos llegar a los 100-150 gr./ día. Por ejemplo: 3 galletas María 10gr., una pequeña tableta de chocolate 35gr., un refresco de cola 25 gr., endulzar un café 15-20 gr. SOBRAN LAS PALABRAS.
Aquí les cito algunos estudios relevantes:
La ingesta de azúcar se asocia con el riesgo de padecer colelitiasis (piedras en la vesícula).
Instituto Nacional de Salud Pública de Bilthoven (Holanda).
El azúcar, junto con la grasa saturada (presente en casi toda la repostería industrial), aumenta el riesgo de padecer cáncer de estómago.
CORNEE, J.; POBLÉ, D.; RIBOLI,E., ET AL.
A casecontrol study of gastric cáncer and nutritional factors in Marseille, France.
Eur. J. Epidemiol., II: 55-65.
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